viernes, 10 de enero de 2014

Bailar bajo la lluvia...

Las gotas comenzaron a caer, suaves y parejas. Le acariciaban el rostro, el cabello, rodaban por sus labios como ella imaginaba, soñaba o esperaba que lo hicieran las yemas de sus dedos...
La lluvia siempre había marcado los momentos de cambio de su vida. Los más sublimes, los más desconcertantes, los que no quería, los que la encontraban desprevenida y parada en un lugar seguro que nunca era tan seguro... Por eso, la lluvia era la bienvenida a sí misma, a su niña interior que se ponía las botas y saltaba feliz entre los charcos de lágrimas de su alma y de su almohada...
La lluvia, con sus rayos y truenos... La noche... Un desconcierto... Una ilusión.. Una mujer renaciendo, dejándose llevar, entre sueños y miedos, y feliz de danzar, una vez más, en brazos de la tormenta...

ROXANA LAURA RONQUILLO
10/01/2014





4 comentarios:

Jorge Curinao dijo...

A veces mis lágrimas se confunde con la lluvia y la vida me enreda en oficios nocturnos.

albert dijo...

hi ho beautiful poem i consider a fantastic write kisses

Roxana Laura Ronquillo dijo...

JORGE CURINAO:
Muchas veces nuestras lágrimas se confunden con la lluvia y vamos enredándonos por distintos caminos...
Un abrazo de <3 a <3
ROO.

Roxana Laura Ronquillo dijo...

ALBERT:
Thank you!!!
you are welcome whenever you want
=)
ROO